Cómo utilizar una piedra pómez: 1. Remoja tus pies u otra zona de piel con callosidades en agua tibia, añadiendo opcionalmente sal marina o 1-2 gotas de aceite esencial de lavanda o jazmín. 2. Humedezca la piedra pómez en la misma agua para facilitar su uso. 3. Para los talones, las palmas y los pies, frote suavemente la piedra pómez con movimientos circulares suaves. 4. Después de limpiarlo, enjuáguese el cuerpo con agua fría. 5. Aplica una loción calmante. ¡¡¡Atención!!! - Por motivos de higiene, no comparta con otras personas las piedras pómez utilizadas anteriormente. - No las utilice sobre pieles delicadas y suaves ni sobre pieles inflamadas y rojas. - No frote la piel con una piedra pómez. - Para un mantenimiento preventivo, basta con dos veces por semana. Cómo cuidar una piedra pómez: - Después de su uso, enjuague bien la piedra pómez con agua y jabón. - Deje que se seque. - Sustituya la piedra pómez si muestra signos de desgaste.