Coloque la punta del tubo en su boca, recoja al bebé, luego inserte el tubo nasal (la punta en forma de gota) en las orificios nasales del bebé y aspire lentamente hasta extraer la mucosa.Si la mucosa se endurece y se condensa, no lo saque a regañadientes. Usa una toalla caliente para calentar el interior de la nariz y luego succiona suavemente la mucosa nasal del bebé.